Primera semana Segunda semana Habiendo acaparado el torneo la mayor parte de la atención esta semana,
solamente pudimos ver a Silvestre Ruisseau y a Eric du Perpignan, Ch.d'H. en el teatro, este último en un
palco con su dama.
 Tercera semana Cuarta semana Al día siguiente del suceso, en L'Epée d'Or, el padre Martin du Heyn se encontró con Jacques de la Loire, Ch.d'H. y
Eric du Perpignan, Ch.d'H., que comentaban el hecho. Aunque intentaron discretamente sonsacar
al Comisionado sobre si había algún otro motivo oculto para la
detención, éste lo negó categóricamente. "He pospuesto la detención
cuanto he podido en atención a la posición de ambos caballeros, pero la
ley es la ley".
 Ajeno a estos acontecimientos, Jean François LaCroix,Ch.d'H. visitó el Casino esta semana
acompañado de su esposa, para celebrar su nombramiento como Ministro de
la Guerra. Por cierto que, al cruzar por ciertas zonas, el Chevalier no
pudo dejar de notar la abundante presencia de guardias del Cardenal
patrullando las calles. ¿Un incremento en la seguridad? ¿Búsqueda de
Laurent de Boissier, de quien no se ha sabido nada en todo el mes y por
cuyo paradero se empieza a temer? ¿Una demostración de fuerza en algún
juego político que se nos escapa? El tiempo lo dirá.
 Cerró el mes de enero un curioso pasacalle nocturno que, organizado por
Armand de la Fère, tuvo que comenzar sin él debido a su inesperada
detención. Ante la ausencia del organizador y como experto en estas
lides, Villiers Daugé de Chevreuse tomó el timón de la comitiva y, tras un breve periplo por los
barrios tabernarios, esquivando las numerosas patrullas de la Guardia
del Cardenal, Armand de Noisel, Armand Leclerc, Silvestre Ruisseau, Michel de Bidouze y Villiers Daugé de Chevreuse pusieron rumbo al Cementerio
de los Inocentes, seguidos por un grupo de prostitutas que vio negocio
en aquella francachela ambulante. 
 
 
 
 
 
 
 
 
Después de mucho tiempo he encontrado el momento para editar y poner en
la web el resumen que Víctor P. Arissa nos mandó sobre la Guerra de los
Treinta Años. ¡Gracias, Víctor!
 
Otra cosa: se han alzado voces pidiendo una simplificación de las reglas
de esgrima; cuando tenga tiempo, voy a preparar una propuesta
(concretamente adaptaré la de Miguel Antón para "Les Liaisons
Dangereuses") y, si Marc está conforme con ella (prerrogativas de
árbitros), la someteremos a votación entre todos, porque no estoy seguro
de que simplificar reglas sea una buena idea; sin embargo, en este caso
y dados los disparates que me han llegado para el torneo (aparte de los
que no mandaron secuencia de combate), me temo que la mayoría de
jugadores no acaba de entender cómo funcionan las reglas de esgrima.
Seguiremos informando al respecto.
 
La fecha límite para el próximo turno es el el final del
viernes, 1 de marzo de 2002, esperemos que con Marc y en Barcelona, si
las cosas no se tuercen.
 
Atentos saludos del Secretariado de Su Majestad Luis XIII 
 
ECOS DE SOCIEDAD
Por alguna razón (razón más que evidente, a nuestro modo de ver), la
mayoría de los caballeros de París dedicaron esta semana a perfeccionar
sus habilidades esgrimísticas. Algunas excepciones notables fueron Armand de Noisel,
al que se vio recorriendo la ciudad subido en el carruaje de la Cofradía
en calidad de escolta, Jean Picard, que asistió a un muy digno estreno teatral
con su dama, Jean-Paul,le Marquis du Morrow, que se dedicó a pasear por el parque, y Michel de Bidouze y Silvestre Ruisseau en
sus respectivos clubs. En resumen, una peculiar semana en la que quien
quisiese ambiente no tenía que dirigir sus pasos a los clubs sino a los
salones de esgrima, tanto regimentales como privados. A todo esto, la
Cofradía de la Caridad ha alquilado dos almacenes más, en puntos
dispersos de París, para ampliar su dedicación a los necesitados.
Por fin, el esperado acontecimiento del torneo de esgrima tuvo lugar. El
torneo, que en principio iba a ser sólo una parte más de la fiesta de
bienvenida que la Guardia de Dragones ofreció a Nicolas Poussin, pasó a ocupar el
lugar protagonista. Sin embargo, las cosas no comenzaron bien: Laurent de Boisier,
organizador del torneo, no aparecía por ninguna parte. Cuando la
frustración comenzaba a hacer mella en el ánimo de los asistentes,
apareció fray Pierre Duval, cargado con tratados y compendios de
esgrima, que se le iban cayendo por el camino obligándole a pararse a
recogerlos. -Messieurs -dijo mientras resoplaba para recuperar el
aliento -,monsieur de Boissier me ha autorizado a arbitrar el torneo;
considera que, dada mi condición de eclesiástico, seré un juez
totalmente imparcial-. Con un encogimiento de hombros y ante la
ausencia de una alternativa mejor, los participantes procedieron a poner
sus nombres en un sombrero para que Pierre Duval emparejase los grupos. Resultó
que había un total de nueve participantes, así que se pidió a Armand Leclerc, que
andaba por allí con un par de botellas y sin ninguna intención de
participar, que se uniese al concurso para poder formar los grupos de
manera coherente. A regañadientes y sin muchas ganas, éste accedió y los
grupos se formaron: en el primero, Jean La Fontaine, Jacques de la Loire, Ch.d'H., Armand de Noisel, Villiers Daugé de Chevreuse y Armand Leclerc. En el
segundo, Lucien Teau du Lit, Jean-Paul,le Marquis du Morrow, Michel de Bidouze, Jean Picard y el padre Martin du Heyn, cediendo una vez más a su debilidad
por la esgrima. A destacar la sorprendente táctica de Villiers Daugé de Chevreuse, vestido con
un traje totalmente blanco con bocamangas y cuello amarillo, y que se
movió como un verdadero acróbata sorprendiendo a sus rivales con
tropiezos simulados y repentinos saltos atrás. También tuvo especial
interés, por motivos obvios, el duelo entre Lucien Teau du Lit y Jean-Paul,le Marquis du Morrow, en el que ambos
se entusiasmaron más de la cuenta y, pese a ganarlo, Lucien Teau du Lit tuvo que
tomarse después un respiro y dejar que le atendiesen un enorme arañazo
en el antebrazo, disfrutando, eso sí, de una botella de vino que
había traído consigo.
Diremos, para abreviar, que Jean Picard y Villiers Daugé de Chevreuse pasaron
a la primera semifinal, y el padre Martin du Heyn se las tuvo que ver con Armand de Noisel en la segunda.
El buen presbítero acusó el esfuerzo de la fase anterior, y fue vencido
sin demasiada dificultad. Por su parte, Villiers consiguió despistar a
Picard y penetrar su cerrada guardia con un tajo de lado que le dio la
victoria. En el combate final, sin embargo, habiendo tenido tiempo
sobrado para estudiar los movimientos de su oponente, Armand de Noisel no se dejó
sorprender y se alzó con la victoria.
En cuanto al resto de la fiesta, poco hay que decir: los asistentes,
fatigados por el torneo, abreviaron cuanto les fue posible y se
retiraron temprano.
La tercera semana pudimos encontrar a Armand Leclerc en Le Cripaud et l'Apricot,
Jean Picard en Chasseurs, y el padre Martin du Heyn en L'Epée d'Or. Además, le Comte d'Ille se "dejó
caer" por el Casino, según su propia expresión, y con aire displicente
puso la friolera de 3000 coronas encima de la mesa de juego. Jean La Fontaine, Lucien Teau du Lit y
Jean François LaCroix,Ch.d'H. (este último en palco y con su dama) asistieron al teatro. El resto
de caballeros... suponemos que descansando del torneo de la semana
anterior.
Amaneció esta semana con una inesperada sorpresa: el Comisionado de
Seguridad Pública mandó detener a dos destacados caballeros, nada menos
que Jean-Paul,le Marquis du Morrow y Armand de la Fère, acusados de batirse ilegalmente. Realmente no entendemos,
con el tiempo que ha transcurrido desde los presuntos hechos, si la
doble detención no será una maniobra puramente política. De todas
formas, ambos se encuentran ahora en la Bastilla a la espera de una
decisión del Comisionado.
Pero el final fue bien diferente del esperado: al llegar a los terrenos
del cementerio, grandes fogonazos y explosiones sorprendieron al grupo
que, embotado por el alcohol, no tuvo tiempo de reaccionar y se vio
rodeado por una hueste de demonios salidos del infierno, de horrísono
aspecto, que entre grandes aullidos y llamaradas intentaron llevarse a
las prostitutas mientras éstas chillaban espantadas. A todo esto,
Villiers consiguió superar la sorpresa y, sin molestarse siquiera en
desenvainar la espada, corrió hacia el grupo de demonios gritando:
"¡SON LOS ESBIRROS DE SATÁN! *-hip-* íAL ATAQUE!" tras lo
cual dio un traspiés y cayó redondo al suelo. El resto de los
caballeros, siendo incapaces de centrar su atención, desenvainaron
y empezaron a dar vueltas en la noche, entre humaredas y resplandores
súbitos, sin obtener otro resultado que tropezar ebriamente unos con
otros. El amanecer fue recibido por las carcajadas de los demonios
perdiéndose en la lejanía, por un intenso olor a pólvora y por los
gruñidos de los hombres que habían ido cayendo redondos con la cabeza
llena de alcohol. 
                                                 N.S.     Quien
         Cargo            Requisitos            minimo    nombra
----------------------  ----------------------  ------  ----------
Ministro de Justicia    Brigadier o Baron          8    Min.Estado
Canciller de Finanzas   Brigadier o Baron         10    Min.Estado
Comis.Seguridad Publ.   Coronel o Chevalier        6    Min.Estado
Marechal de France      General o superior        12    Rey
Inspector Gral.Infant.  Tte.General o superior    10    Min.Guerra
Inspec.Gral.Caballeria  Tte.General o superior    12    Min.Guerra
                                                 N.S.     Quien
         Cargo            Requisitos            minimo    nombra
----------------------  ----------------------  ------  ----------
1 Ministro sin Cartera  Brgder. o Baron           10    Min.Estado
Ayudante General        General o superior         8    Marechal F.
Jefes de Ejercito       General o superior        10    Marechal F.
Aide camara Marechal    Teniente Coronel           6    Marechal F.
Jefes de Brigada        Brigadier General          6    Insp.Grles.
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